"Cuando llegan los perros con algún problema de conducta, de miedos, de agresividad, de inseguridad... lo que hacemos es una terapia para poder reconducir esas conductas desadaptadas y que luego, cuando sean adoptados, los propietarios no tengan problemas con ellos", explica Lilyanna Alba, de Rebican, entidad colaboradora con el albergue municipal en la educación canina y modificación de conducta.
Golfo, Zarck, Buddy y Golfillo, son cuatro de los perros acogidos en el albergue canino municipal para los que desde este sábado empieza una nueva vida. Un 'milagro' que ha sido posible gracias a la campaña 'Adóptame' promovida por la concejalía de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Ponferrada que ha sacado a la calle en esta jornada a varios de los animales que en este momento buscan una 'familia' de acogida.
La iniciativa ha tenido como escenario la calle del Cristo, en pleno centro de la ciudad. La importante afluencia de público coincidiendo con la celebración del mercado semanal ha permitido a muchas personas tener la oportunidad de ver de cerca a los animales, tomar contacto con ellos y llevárselos a casa como un miembro más.
"La campaña va viento en popa, casi mejor de lo esperado y esperamos que en lo que quede de día siga aumentando el número de adopciones", ha señalado el concejal de Medio Ambiente, Roberto Mendo, quien ha destacado como desde que se inició la campaña este viernes han sido ya un total de cinco los perros que han sido adoptados de los 17 que están pendientes de encontrar nuevo hogar.
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